El servicio de oftalmología del Hospital Gregorio Marañón aplica técnicas pioneras para corregir el estrabismo de pequeño ángulo y la visión doble

El equipo dirigido por José Luis Urcelay ha desarrollado técnica quirúrgicas pioneras en nuestro país en el tratamiento del estrabismo de pequeño ángulo. El objetivo de estos procesos es corregir la desviación ocular que se produce tanto en dirección vertical u horizontal por debajo de 10 dioptrías prismáticas, así como evitar la visión doble.

22/03/2022

El Hospital General Universitario Gregorio Marañón es referente en el tratamiento del estrabismo de pequeño ángulo mediante algunas cirugías como recesiones parciales, mini-plegamientos centrales y transposición anterior con miopexia del oblicuo inferior. Pilar Merino, oftalmóloga del Marañón, ha obtenido dos galardones con la presentación de uno de estos tratamientos quirúrgicos, ...

El Hospital General Universitario Gregorio Marañón es referente en el tratamiento del estrabismo de pequeño ángulo mediante algunas cirugías como recesiones parciales, mini-plegamientos centrales y transposición anterior con miopexia del oblicuo inferior. Pilar Merino, oftalmóloga del Marañón, ha obtenido dos galardones con la presentación de uno de estos tratamientos quirúrgicos, en concreto, la miopexia y transposición anterior de oblicuo inferior sin desinserción.

Se denomina estrabismo de ángulo pequeño a la desviación ocular, por debajo de 10 dioptrías prismáticas, en dirección horizontal o vertical que, aunque no se aprecia estéticamente, puede producir visión doble en pacientes adultos. "Esta desviación ocular puede corregirse, en algunos casos de estrabismo horizontal, con toxina botulínica o con ejercicios de ortóptica que se realizan para el restablecimiento de la visión binocular pero no dan resultados con las desviaciones verticales" explica Pilar Merino.

La oftalmóloga del Marañón explica que "en la actualidad han aumentado las expectativas de los pacientes de no utilizar gafas con prismas, es decir cristales que se adaptan a las gafas, porque además de disminuir la calidad de la visión, son más antiestéticos para los pacientes. Además, este tratamiento no es útil para las personas que tienen desviaciones diferentes según la posición de la mirada, llamadas incomitantes, que es en la mayoría de los casos, puesto que no hay ningún prisma que pueda compensar esa desviación".

Las dos técnicas pioneras

Estas técnicas quirúrgicas se aplican en casos de visión doble y corrigen también desviaciones verticales de ángulo pequeño pues en vez de cortar y debilitar todo el músculo, se puede o bien debilitar una parte de este, reforzar solo la parte central del músculo o cambiar su trayecto sin necesidad de cortarlo. La ventaja de estos procedimientos es que no provocan daños en la vascularización del ojo, son más inocuos, más sencillos de realizar, se producen menos hemorragias y sobre todo suponen un mayor beneficio para los pacientes.

Estas técnicas no sólo están siendo utilizadas por varios centros españoles y del mundo, sino que han sido objeto de diversas publicaciones, y presentadas en sociedades científicas como en la Sociedad Internacional de Estrabismo, en la Sociedad Española de Oftalmología, en la Sociedad Española de Estrabismo y Oftalmología Pediátrica, en la Sociedad Mundial de Estrabismo y Oftalmología Pediátrica, así como en el Congreso Latinoamericano de Estrabismo.