Con motivo del Día Mundial de la Salud Auditiva que se conmemora este viernes 3 de marzo, Audika España, compañía que forma parte del grupo Demant, especialista mundial en el sector de la salud auditiva, ha realizado un análisis sobre la situación de España en relación con la pérdida auditiva.

El envejecimiento poblacional se ha convertido en un tema cada vez más importante en todo el mundo. Sin embargo, en España, en particular, se espera que este fenómeno tenga un impacto significativo en la sociedad en los próximos años.

En la actualidad el porcentaje de personas con pérdida auditiva es muy elevado y las previsiones para un futuro próximo son más preocupantes. Hasta 2030 , la población española entre 60 y 85 años crecerá en torno al 20%. Mientras que en 2040 se estima un crecimiento del 42% de ciudadanos con más de 60 años.

Por lo que es importante tener en cuenta que, siguiendo esta tendencia, en 2045 España tendrá que proporcionar asistencia auditiva a 47,3% más de personas mayores de 60 años en comparación con la cifra actual. En resumen, según datos de 2020 del estudio de EuroTrack para España sobre cuestiones clave de la pérdida de audición y la atención audiológica para 2045, se estima que, de media, un tercio de la población mayor de 60 años sufre pérdida auditiva, cifra que llegará hasta los dos tercios en personas mayores de 85 años, de los que un escaso porcentaje está previsto que tome medidas.

Un desafío que es responsabilidad de todos. Por eso, la Organización Mundial de la Salud, con motivo del Día Mundial de la Audición, se ha marcado como objetivo destacar la importancia de integrar el cuidado del oído y la audición en la atención primaria, como un componente esencial de la cobertura universal de salud. Además, unido al envejecimiento de la población, se debe alentar a integrar la atención primaria del cuidado del oído y la audición.

Ana Soto, audioprotesista de Audika España, ha explicado que "los problemas de audición no tratados pueden tener un impacto negativo en la calidad de vida, suponiendo una dificultad extra en la capacidad para comunicarse con los demás y participar en actividades sociales. Por lo que ante una población envejecida es más importante la decisión de tomar medidas preventivas". A lo que Soto ha añadido "la población tiene la oportunidad de realizarse exámenes auditivos en centros auditivos de forma gratuita para determinar si existe pérdida, por lo que somos un apoyo muy importante a la atención primaria. Para agilizar este proceso de diagnóstico, si la persona manifiesta algún síntoma de pérdida auditiva, un técnico superior de audiología como los que están en los centros auditivos Audika puede realizarle ese examen auditivo".

La pérdida auditiva no solo afecta a la capacidad de recibir sonidos, sino que puede afectar a la función física y social y se asocia con déficits cognitivos, alteraciones del estado de ánimo y trastornos del comportamiento. El impacto de la discapacidad auditiva en la calidad de vida se puede minimizar con la ayuda de audífonos y es que, según datos del EuroTrack, más de un 71% de las personas con audífonos se arrepiente de no haber tomado medidas con anterioridad, destacando, entre otros aspectos, la notable mejora que ha experimentado su calidad de vida. "La vida social es esencial para el bienestar de las personas, por lo que cuando la persona con pérdida auditiva empieza a usar audífonos es más propenso a integrarse en grupos sociales, lo que les cambia la vida ya que les ayuda a vivir experiencias que ya habían olvidado", ha concluído Soto, al tiempo que ha remarcado la importancia de la concienciación.