Artículo original publicado por Aural La mastoiditis es una infección que afecta a la porción mastoidea del hueso temporal, justo detrás del pabellón auditivo. La mastoides está compuesta por pequeñas cavidades que contienen aire, conectadas entre ellas y con el oído medio. Ocurre habitualmente como una complicación de una otitis media, ...
Artículo original publicado por Aural
La mastoiditis es una infección que afecta a la porción mastoidea del hueso temporal, justo detrás del pabellón auditivo. La mastoides está compuesta por pequeñas cavidades que contienen aire, conectadas entre ellas y con el oído medio. Ocurre habitualmente como una complicación de una otitis media, en la cual la infección se extiende desde la caja del tímpano a la mastoides. Como factores de riesgo se consideran en general la presencia de otitis recurrentes, diagnósticos previos de otitis media crónica o colesteatoma o también deficiencias del sistema inmunitario.
Es mucho más frecuente en niños que en adultos, especialmente en menores de 2 años y suele estar causada por los mismos tipos de bacterias responsables de la otitis media.
Síntomas de la mastoiditis
Los síntomas más comunes de la mastoiditis son dolor de oído intenso y persistente, inflamación y enrojecimiento detrás de la oreja, fiebre alta y en algunas ocasiones secreción purulenta por el oído. En casos de mayor gravedad, puede haber también dolor de cabeza, mareo, cambios en el equilibrio o alteraciones en la movilidad facial. Es importante acudir al especialista si se experimentan estos síntomas para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados. La mastoiditis es una infección seria que puede llevar a complicaciones graves dentro del sistema nervioso central si no se trata oportunamente.
Diagnóstico de la mastoiditis
El diagnóstico de la mastoiditis generalmente implica una combinación de evaluación médica y pruebas diagnósticas. El médico realizará una evaluación detallada que incluirá la revisión de los síntomas, la exploración de la zona afectada y la revisión de los antecedentes del paciente.
Además de la exploración física, pueden ser útiles las siguientes pruebas complementarias:
Tratamiento de la mastoiditis
El tratamiento de la mastoiditis generalmente implica una combinación de antibióticos y, en casos graves, puede requerir cirugía. El tratamiento específico dependerá de la gravedad de la infección y de la causa subyacente. Las opciones de tratamiento incluyen:
Es importante seguir el tratamiento recetado y completar toda la pauta de antibióticos para asegurar que la infección se haya curado por completo. En casos con evolución tórpida pueden producirse complicaciones como abscesos locales o intracraneales, meningitis, pérdida auditiva, parálisis facial y vértigo