El sector de la óptica continúa la senda de crecimiento, con un 2,9% en 2024, y alcanza los 2.165,7 millones en facturación. Pero lo hace de una forma más moderada que en ejercicios anteriores: hay que recordar que en 2022 y 2023 el incremento fue de más del 4 % ...
El sector de la óptica continúa la senda de crecimiento, con un 2,9% en 2024, y alcanza los 2.165,7 millones en facturación. Pero lo hace de una forma más moderada que en ejercicios anteriores: hay que recordar que en 2022 y 2023 el incremento fue de más del 4 % y del 6 %, respectivamente. Esa es una de las principales conclusiones extraídas del recién presentado Libro Blanco de la Visión, en el que la Federación Española de Asociaciones del Sector Óptico (FEDAO) realiza un completo análisis de los resultados obtenidos en el último ejercicio.
Pero esta publicación que analiza de forma exhaustiva la situación del sector vuelve a poner también el foco en el reto más acuciante: la falta de profesionales. Como alerta Inés Mateu, presidenta de FEDAO, existe una gran carencia de profesionales en el sector óptico: "En los próximos diez años, estimamos que vamos a perder a más del 20 % de los actuales profesionales y no estamos pudiendo preparar el relevo generacional. Cada vez la cifra de egresados es menor y necesitamos activar otras ideas". "En España, el servicio de óptica y optometría es de primera calidad. Cada óptica da de media un servicio a 4.000 personas y necesitamos poder seguir creciendo, abriendo y atendiendo la salud visual de los ciudadanos", manifiesta.
Además, por primera vez en el último trienio, el número de ópticas en España se reduce (un -1,9 %) hasta las 9.815. De acuerdo con los registros, hay 18.408 ópticos optometristas colegiados en España (+1,24 % respecto a 2023), pero el 20,95 % de ellos (cerca de 4.000) se jubilarán en la próxima década. Por lo tanto, la realidad es que existe una gran carencia de profesionales de la visión en España, como avisa Elisenda Ibáñez, coordinadora de la publicación. Sobre todo, teniendo en cuenta que "la ratio de profesionales necesario por óptica es de 2,7 y que hay cerca de 10.000 establecimientos sanitarios de óptica en el país".
"El paso de los años acrecentará este problema en el mercado laboral. Si no se toman medidas al respecto, el sector no podrá seguir evolucionando, dado que todo establecimiento óptico requiere de un profesional para su apertura", sentencia Ibáñez. Viendo el panorama general queda claro, por tanto, que no se trata de un escenario homogéneo, como podremos corroborar en el siguiente análisis de País Vasco, La Rioja y Navarra.
País Vasco, el debate sobre la incorporación de los ópticos optometristas en la AP
En País Vasco, al término de 2024 estaban registrados un total de 704 colegiados ópticos. Si analizamos el número de ópticos optometristas de la región desde 2019 vemos una tendencia ascendente: en ese periodo se han incrementado desde 668 a los 749 confirmados el año pasado, siendo Bizkaia la provincia donde se registran más de la mitad (358). Además, ocupa el quinto lugar en el ranking de habitantes por óptica, con un total de 6.463. En cuanto al número de ópticas, se mantiene la misma cifra de 2023 (347), tras la enorme caída del ejercicio anterior: en 2022 había 443. En términos de facturación, el mercado vasco aportó al total español 97,5 millones de euros en 2024, casi tres más que el ejercicio previo.
En este contexto, sigue el debate en Osakidetza, en la mesa del Pacto Vasco de Salud, para el refuerzo de la Atención Primaria. Un debate en el que se ha planteado la incorporación de nuevos perfiles profesionales en el sistema, como psicólogos, nutricionistas, administrativos de la salud y también ópticos optometristas. Este modelo, han explicado los distintos agentes, "tendrá una visión más integral de la persona, con la idea de mantener unos equipos estables que puedan hacer un seguimiento continuo de los pacientes".
El grupo de trabajo plantea analizar "los nuevos retos asistenciales desde la diversidad, por lo que se deberán tener en cuenta para establecer ratios o cupos de pacientes (un médico de familia por 1.500 pacientes) los índices de personas mayores, migrantes y el índice socioeconómico de cada zona porque eso impacta en la salud de las personas a la hora de definir qué profesional debe incorporarse a un determinado centro de salud y a otro".
Navarra, importantes hallazgos en la lucha contra la pandemia de la miopía
En la comunidad navarra, el INE ha tenido registro de 216 colegiados a finales del ejercicio de 2024, lo que significa que desde 2019 han aumentado el censo de profesionales en 15 personas. Si analizamos la variable de habitantes por establecimiento óptico, la Comunidad Foral de Navarra ocupa el top 3 (6.988), solo por detrás de Melilla e Islas Baleares. También hay que destacar el aumento de la facturación del sector en Navarra, 900.000 euros aproximadamente. Así, en 2024, la óptica navarra aportó 32,5 millones de euros. Respecto al número de establecimientos sanitarios en la comunidad foral, gana uno más en relación al año anterior (98), aunque todavía sin llegar a los 100 que tenía disponibles en 2022.
Por otro lado, el Libro Blanco 2024 volvió a poner en foco en la miopía, la amenaza más seria para la visión. Declarada como pandemia hace años por la Organización Mundial de la Salud, esta patología, un tipo de error de refracción del ojo que se presenta cuando la luz que entra se enfoca de manera incorrecta y provoca que los objetos distantes aparezcan borrosos. El Barómetro de la Miopía Infantil en España estima que la tasa de niños con este problema ocular se sitúa en el 20 %. Sin embargo, "el avance de técnicas, servicios y productos para frenar y controlar su desarrollo será clave para evitar llegar a prevalencias similares a la de los países asiáticos, que rozan cifras del 90 %", sostiene Elisenda Ibáñez.
Y precisamente una investigación impulsada por el Departamento de Oftalmología de la Clínica Universidad de Navarra ha descubierto un importante hallazgo hace unas semanas: una mayor exposición al sol protege frente a esta patología. Los especialistas han medido para ello el área del biomarcador CUVAF, una mancha en la superficie ocular ocasionada por la exposición a la radiación ultravioleta en la conjuntiva del ojo, que es más grande en pacientes sin este problema ocular.
Según Sergio Recalde, investigador del Laboratorio de Oftalmología experimental de la Clínica, "tener en cuenta el CUVAF nos proporciona un número objetivo para establecer la relación entre el tiempo que los menores pasan al aire libre y la progresión de la miopía. Hemos constatado que los sujetos que están menos horas por semana fuera de casa sufren más este problema ocular. Por eso, es importante considerarlo como un biomarcador clave".
El estudio, publicado en la revista Frontiers in Medicine, ha contado con 263 participantes de entre 6 y 17 años a los que se les midió esta área del ojo en consulta con equipos especiales. Los resultados obtenidos muestran que el inicio general de la miopía se produce a partir de los ocho años y que los niños miopes pasaron significativamente menos horas al aire libre por semana, en comparación con el grupo de control. Además, los investigadores encontraron diferencias estadísticamente relevantes en el área de CUVAF, ya que esta era más pequeña entre los menores con esta afección en relación con los que tenían una visión correcta.
"Estos datos nos animan a seguir insistiendo en la importancia de que los menores pasen tiempo al aire libre. Se ha demostrado que cuanto más tiempo dediquen a pantallas y a actividades que requieren solo visión de cerca, existe un riesgo mayor de que progrese la miopía", concluye Recalde.
La Rioja, en búsqueda de ópticos optometristas investigadores
Esta comunidad sigue la tendencia de las dos anteriores en el apartado de establecimientos ópticos. Después de perder una docena de 2022 a 2023, el año pasado recuperó uno. Con lo cual, actualmente habría 61 ópticas en la zona. Asimismo, en 2024 había en esta autonomía 5.375 habitantes por establecimiento óptico, una cifra media en la clasificación por comunidades. También en La Rioja la facturación dio un resultado positivo: de los 14,7 millones de euros de 2023 a los 15,2 que el mercado recaudó el año pasado.
Mientras tanto, la Fundación Rioja Salud ha lanzado una convocatoria pública para la contratación de cuatro graduados en Óptica y Optometría que contribuirán a la detección, diagnóstico y tratamiento de afecciones oftalmológicas. Su incorporación se realiza en el marco del proyecto de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) Mejora del proceso asistencial en consultas externas de Oftalmología.
Esta convocatoria se suma a la reciente creación de nuevas categorías estatutarias del Servicio Riojano de Salud que permitirá incorporar más perfiles profesionales al sistema sanitario riojano. En concreto, podólogo, óptico optometrista y técnico especialista en audiología protésica. El SERIS podrá, de este modo, ofertar plazas públicas en estas categorías en próximas ofertas de empleo.
Entre las funciones que realizarán los profesionales seleccionados en la convocatoria de Fundación Rioja Salud destacan la detección de alteraciones oculares refractivas, que pueden ser corregidas mediante sistemas ópticos como gafas, o la prescripción y adaptación de lentes oculares y dispositivos de baja visión. Además, los optometristas aplicarán técnicas de terapia visual, así como el desarrollo de propuestas orientadas a la educación visual, la contactología y la higiene visual. Igualmente, realizarán diferentes pruebas diagnósticas y técnicas de imagen: retinografías, tomografías de coherencia óptica, biometrías oculares, medición de agudeza visual y presión intraocular, entre otras.
En este contexto, científicos del Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR) han dado con una importante clave para ayudar a prevenir uno de los problemas de salud visual más prevalentes al demostrar en un reciente estudio que la administración de azul de metileno como agente neuroprotector puede ayudar a prevenir la pérdida de visión que afecta a pacientes que sufren glaucoma, segunda causa de ceguera en el mundo. María Martín, consejera de Salud y Políticas Sociales de la región, remarca que el hallazgo del CIBIR "supone un avance muy importante en la prevención de enfermedades de la retina como es el glaucoma".
El estudio, realizado en colaboración con científicos de la Universidad de Buenos Aires, fue llevado a cabo en modelos animales de experimentación, en los cuales se indujeron condiciones de hipertensión ocular. Durante un periodo de siete días, los animales fueron divididos en dos grupos. El primero de ellos fue tratado con dos inyecciones diarias de azul de metileno y el segundo fue administrado en las mismas ocasiones, pero sin el empleo de azul de metileno.
Los resultados revelaron que el tratamiento con azul de metileno logró restaurar significativamente las funciones visuales y prevenir la pérdida de neuronas en la retina. Además, dado el alto perfil de seguridad del azul de metileno, esta investigación plantea su potencial como una nueva estrategia farmacológica para combatir la progresión de la neuropatía óptica y prevenir la pérdida de visión en pacientes con glaucoma. Así las cosas, los resultados sugieren que este tratamiento podría implementarse en el futuro como una terapia complementaria con los medicamentos que reducen la presión intraocular para las personas que enfrentan el riesgo de pérdida visual debido al glaucoma.