La fatiga visual digital afecta ya al 70 % de la población por el uso excesivo de pantallas

El uso intensivo de ordenadores, móviles o tabletas genera síntomas como visión borrosa, sequedad ocular o dolores de cabeza, en gran medida por la acción de la luz azul, una radiación que puede acelerar el envejecimiento ocular y aumentar el riesgo de patologías como la DMAE o las cataratas.

17/07/2025

En un entorno laboral y social cada vez más digitalizado, los ojos se enfrentan a un nuevo reto: la exposición prolongada a pantallas, que ya supera las 7 horas diarias en gran parte de la población adulta. Esta tendencia ha dado lugar a un fenómeno creciente: la fatiga visual digital, ...

En un entorno laboral y social cada vez más digitalizado, los ojos se enfrentan a un nuevo reto: la exposición prolongada a pantallas, que ya supera las 7 horas diarias en gran parte de la población adulta. Esta tendencia ha dado lugar a un fenómeno creciente: la fatiga visual digital, causada principalmente por la luz azul emitida por dispositivos electrónicos como ordenadores, móviles o tabletas.

Se calcula que más de un 70% de la población sufre fatiga visual debido a la alta exposición a las pantallas, y que alrededor de 250.000 personas pueden ser sensibles a la exposición a la luz azul. Los grupos más susceptibles pueden ser niños y adolescentes expuestos desde edades tempranas; adultos y ancianos con mayor riesgo de aparición de patologías visuales como presbicia o DMAE; trabajadores digitales o usuarios de lentes de contacto.

Aunque se recomienda no superar las 2 horas al día de exposición continua a pantallas, el ritmo de vida actual dificulta cumplir con esta recomendación. La luz azul, por su alta energía, puede penetrar en las estructuras profundas del ojo, afectando especialmente a la mácula y acelerando el envejecimiento celular. Entre los síntomas más frecuentes se encuentran la visión borrosa, irritación y sequedad ocular, dificultad para enfocar, dolor de cabeza e incluso alteraciones del sueño. Además, la exposición a la luz azul se ha relacionado con el envejecimiento ocular prematuro, lo que podría aumentar el riesgo de enfermedades oculares como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) y la aparición de cataratas.

En un contexto donde reducir significativamente el tiempo de uso de las pantallas no siempre es posible, es cada vez más necesario contar con soluciones que ayuden a proteger la salud visual frente al impacto acumulado de la luz azul. Algunos complementos específicos con antioxidantes pueden ayudar a neutralizar los efectos de la luz azul y favorecer el cuidado ocular diario.

Nurane® Blue Light de Salvat, el aliado contra la fatiga digital

El pigmento macular está compuesto de luteína y zeaxantina, dos sustancias antioxidantes que, según algunos estudios realizados podrían contribuir a la prevención del daño ocular convirtiéndose en una protección natural contra la luz azul. El organismo no puede sintetizar estos antioxidantes por lo que depende de su ingesta a través de la alimentación.

Nurane® Blue Light del Grupo Farmacéutico Salvat contiene luteína, zeaxantina, vitamina E, y zinc, ingredientes que ayudan a reducir los efectos de la luz azul y al mantenimiento de la visión en condiciones normales.

Los estudios realizados revelan que la suplementación con 10 mg de luteína y 2 mg de zeaxantina al día se relacionan con un mejor rendimiento visual.