Las personas con problemas de visión no tienen por qué renunciar a disfrutar de la natación o de las actividades acuáticas con nitidez. Existe una solución, muy desconocida por los españoles: las gafas de natación y las máscaras de bucear graduadas, que ofrecen una visión perfecta bajo el agua. "Se ...
Las personas con problemas de visión no tienen por qué renunciar a disfrutar de la natación o de las actividades acuáticas con nitidez. Existe una solución, muy desconocida por los españoles: las gafas de natación y las máscaras de bucear graduadas, que ofrecen una visión perfecta bajo el agua.
"Se trata de la opción más segura y eficaz para tener una visión nítida bajo el agua, ya sea en el mar, en la piscina o en cualquier entorno acuático", afirma Alicia Escuer, directora técnica y de formación de Óptica & Audiología Universitaria. "No todas las gafas de natación y máscaras de buceo son susceptibles de ser graduadas, esta opción la ofrece solo un determinado tipo de ellas, por eso es importante asesorarse antes de adquirirlas. De hecho, hay modelos personalizados en los que se puede obtener la graduación exacta".
En este sentido, las gafas y máscaras acuáticas permiten adaptarse a la graduación de cada usuario, tanto si necesitamos solo corrección para lejos como para ambas distancias, lejos y cerca. Las lentes están fabricadas en policarbonato óptico y tienen un tratamiento anti-vaho, que se inyecta en el molde y ofrece una eficacia y resistencia óptima. Asimismo, poseen protección UV. También existen opciones infantiles.
Diseñadas para proporcionar una visión nítida y segura bajo el agua, las gafas y máscaras acuáticas graduadas están pensadas tanto para nadadores o buceadores profesionales como para recreativos, y permiten corregir la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo sin necesidad de lentillas, que son poco recomendables en entornos acuáticos.
"Para nadar o bucear con lentillas debemos llevar también gafa de natación o buceo y asegurarnos que sea totalmente estanca", afirma Escuer. "Sin esta protección no es recomendable su uso en el agua, ya que esta contiene sustancias como el cloro, microorganismos o gérmenes, que pueden causar infecciones o reacciones alérgicas en los ojos", concluye.