Faricimab mejora y mantiene la visión en dos de las principales causas de pérdida de visión

Dos artículos publicados en The Lancet destacan los resultados de un año de los ensayos fase III que evalúan faricimab en degeneración macular asociada a la edad neovascular o húmeda (DMAEn) y en edema macular diabético (EMD).

27/01/2022

Roche ha anunciado que la revista The Lancet ha publicado dos artículos donde destacan los resultados a un año de cuatro estudios pivotales de fase III con faricimab, un anticuerpo biespecífico en investigación para degeneración macular asociada a la edad neovascular o "húmeda" (DMAE) y el edema macular diabético (EMD). ...

Roche ha anunciado que la revista The Lancet ha publicado dos artículos donde destacan los resultados a un año de cuatro estudios pivotales de fase III con faricimab, un anticuerpo biespecífico en investigación para degeneración macular asociada a la edad neovascular o "húmeda" (DMAE) y el edema macular diabético (EMD). Los cuatro estudios han contado con la participación de más de 3.000 personas y alcanzaron sus objetivos primarios y demostraron que las personas tratadas con farcimab hasta cuatro meses lograron mejoras en la visión no inferiores a las conseguidas con aflibercept administrado cada dos meses.

En particular, cerca de la mitad de los pacientes candidatos a recibir faricimab pudieron pasar cuatro meses entre tratamientos durante el primer año, y aproximadamente tres cuartas partes pudieron pasar tres meses o más en los estudios TENAYA y LUCERNE de DMAEn y en los estudios YOSEMITE y RHINE de EMD. El tratamiento estándar actual para estas enfermedades que son potencialmente causa de ceguera requiere inyecciones oculares hasta una vez al mes.

Tal y como ha declarado el doctor Levi Garraway, director médico y jefe de Desarrollo Global de Productos de Roche, "estos datos publicados en The Lancet refuerzan el potencial de faricimab como una importante opción de tratamiento que puede ayudar a mejorar y mantener la visión, a la vez que prolonga el tiempo entre tratamientos hasta cuatro meses. Seguimos profundamente comprometidos con el desarrollo de nuevos medicamentos, como faricimab, que pueden ayudar a preservar la vista a muchas personas que viven con enfermedades graves de la retina".

Si se aprueba, faricimab sería el primer anticuerpo biespecífico para el ojo, que se dirige e inhibe a dos vías distintas vinculadas a una serie de enfermedades de la retina que amenazan la visión, neutralizando la angiopoyetina-2 (Ang-2) y el factor de crecimiento endotelial vascular-A (VEGF-A). La inhibición de ambas vías ha demostrado tener beneficios potencialmente complementarios, estabilizando los vasos y reduciendo así la extravasación vascular y la inflamación más que la inhibición de la vía del VEGF-A por sí sola.

Los principales resultados de los estudios

En los estudios TENAYA y LUCERNE sobre DMAE, la ganancia media visual con respecto al valor inicial al año en los brazos de faricimab fue de +5,8 y +6,6 letras, respectivamente, en comparación con +5,1 y +6,6 letras en los brazos con aflibercept. Los estudios también midieron la proporción de personas en el brazo de faricimab que fueron tratadas con dosis programadas cada tres o cuatro meses durante el primer año.

Cabe destacar que el 46% (n=144/315) de los pacientes de TENAYA y el 45% (n=142/316) de LUCERNE pudieron ser tratados cada cuatro meses durante el primer año. Otro 34% (n=107/315) de los pacientes de TENAYA y el 33% (n=104/316) de LUCERNE pudieron ser tratados cada tres meses. En conjunto, casi el 80% de los pacientes tratados con faricimab pudieron pasar tres meses o más entre tratamientos durante el primer año. En general, faricimab fue bien tolerado en ambos estudios, con un perfil beneficio-riesgo favorable.

En los estudios YOSEMITE y RHINE sobre el EMD, la ganancia media visual con respecto a la situación inicial al año fue de +11,6 y +10,8 letras en la tabla optométrica en los grupos de tratamiento y ampliación de faricimab, +10,7 y +11,8 letras en los grupos de dos meses y +10,9 y +10,3 letras en los grupos de aflibercept, respectivamente. Un objetivo secundario en ambos estudios midió la proporción de personas en los brazos de faricimab de tratar y extender que lograron programas de dosificación cada tres o cuatro meses al final del primer año.

Es importante destacar que el 53% (n=151/286) de los pacientes del grupo de tratar y extender de faricimab en YOSEMITE y el 51% (n=157/308) en RHINE lograron una dosificación cada cuatro meses al cabo de un año. Un 21% adicional (n=60/286) de los pacientes de faricimab de tratar y extender y extensión en YOSEMITE y un 20% (n=62/308) en RHINE lograron una dosis de tres meses. En conjunto, más del 70% de los pacientes de faricimab de tratar y extender pudieron permanecer tres meses o más entre tratamientos al final del primer año.