IM OPTICAS nº 2

46 Síntomas como el enrojecimiento o picor de los ojos pueden ser avisos de miopía. Por ello, la asociación ha querido abordar en las preguntas estas posibles causas. Con todo, hasta el 38% cree que no ve bien. De los miopes, hasta ocho de cada diez afirma que no ve bien. Cuatro veces más que lo que contestan los no miopes. “Las expectativas no son halagüeñas para la siguiente generación” El estudio enumera tres factores principales que se combinan entre sí: los antecedentes de tabaquismo, rojez y picor de ojos en visión próxima; la edad, las horas ante pantallas y una dieta pobre en fruta y verdura. Y, además, un factor único: que no exista ningún miope en la familia. Las variables “incontrolables” por medio de la acción humana son la genética (edad y antecedentes familiares); las que sí se pueden fomentar son las de que los menores pasen más tiempo en el exterior “siendo una de las recomendaciones que siempre lanzan los profesionales de la visión”. “Es ahora labor de la asociación y de otras entidades educativas o académicas seguir utilizando el patrón y la fórmula aquí descrita para proyectar estimaciones numéricas, acorde con la evolución demográfica y social de la ciudadanía, del porcentaje de jóvenes que, si no realizamos cambios en nuestro estilo de vida, podrán verse afectados por esta pandemia dentro de treinta años”, avisa Visión y Vida. En este sentido, cita al Brien Holden Institute para recordar que es labor de profesionales de la salud y de la ciudadanía frenar el número de miopes que superen las cinco dioptrías, ya que a partir de este valor la miopía puede dejar de ser una disfunción refractiva para convertirse en una patología ocular. “Tomando las medidas de control y freno miópico pertinentes podríamos reducir en un 95% los casos de ceguera”. El informe, que ha recibido el apoyo de Correos Express, se ha realizado con el sondeo a través de redes sociales, email y universidades españolas, así como contactos laborales o personales. Y añade como apunte final que en él no está recogido el dato de que la tasa de miopía entre los jóvenes de entre 18 y 34 años ya alcanza al 55,3% y, de estos, el 63,2% tienen antecedentes familiares de alteraciones visuales. Preocupa aún más sabiendo que a final de 2019 eran algo más de 2,5 millones los niños de 5 años con miopía. “Nos enfrentamos a un incremento sustancial en número de afectados por miopía”, sentencia la asociación de utilidad pública. ““NOS ENFRENTAMOS A UN INCREMENTO SUSTANCIAL EN NÚMERO DE AFECTADOS POR MIOPÍA”

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