IM ÓPTICAS nº 3

14 EL ÓPTICO OPTOMETRISTA ““SOMOS PROFESIONALES SANITARIOS Y NOS DEBEMOS AL PACIENTE, PARA CUIDAR DE SU SALUD VISUAL Y PARA ACOMPAÑARLE DURANTE SU VIDA EN EL CUIDADO DE SUS OJOS” Javier Vega Centro Óptico San Gabriel y Zeiss Vision Center Sevilla Viapol (Sevilla) Javier Vega Domínguez es óptico optometrista, co-propietario del Centro Óptico San Gabriel y de Zeiss Vision Center Sevilla Viapol en la capital andaluza, desde donde trabaja habitualmente para satisfacer las necesidades de sus clientes, “tanto a nivel más técnico de gabinete de refracción, como en el asesoramiento”, afirma. Pero no solo eso, sino que también “coordino los equipos de ambos centros a nivel de RRHH y me encargo de la comunicación hacia el cliente en redes sociales y demás medios digitales, siempre con el apoyo de las empresas contratadas para este efecto”, añade. Su vocación como óptico optometrista le viene de familia. Es conocedor del sector desde siempre, porque su padre trabajó en Indo durante más de 30 años. “Siempre supe que me dedicaría a esto. No solo por mi padre, sino porque también una de mis hermanas es óptico optometrista como yo”, puntualiza. Una profesión que, en los últimos años, como en todos los sectores, Javier Vega cree que “ha cambiado sobre todo a nivel de realizarse una comunicación basada en el precio y no tanto en los servicios”. A pesar de que sus clientes siguen demandando, sobre todo, “atención personalizada, solución a sus problemas y asesoramiento técnico y estético, de manera honesta y profesional”, señala. En ese sentido, Javier Vega considera que “el negocio de la óptica, a pesar de estar tan impactado por el valor precio, cada vez demanda más una mejor atención, una mayor especialización y un trato más individualizado”. Y añade: “No podemos tratar a todos los pacientes-clientes por igual, porque las necesidades visuales cada vez son más particulares”. Por eso, este óptico optometrista de Sevilla cree que los cambios hacia los que debería dirigirse su profesión son “una mayor profesionalidad, una mejor atención, y un trato más honesto e individualizado. Y siempre tener como objetivo que, si bien se nos engloba en un apartado comercial, somos profesionales sanitarios y nos debemos al paciente, para cuidar de su salud visual y para acompañarle durante su vida en el cuidado de sus ojos”. Un deber hacia el paciente que se puso a prueba durante el periodo de confinamiento, debido al Covid-19. Para Javier Vega, “implicó un esfuerzo muy grande para el sector una vez que, como negocio sanitario, tuvimos que atender a las demandas de manera más individualizadas, para aquellas personas que tuvieron urgencias durante el periodo de confinamiento”. Un esfuerzo que, tras el confinamiento, tampoco desfalleció. Javier Vega cuenta que se generó un aluvión de clientes-pacientes “por la retención en el consumo durante los peores momentos de la pandemia y por las necesidades visuales causadas por el momento en el que vivimos confinados”. Un periodo en el que hubo “un sobreesfuerzo visual causado por una mayor actividad cercana y la limitación demuchas otras actividades”, concluye Javier Vega.

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=