José Tomás García se hizo óptico por casualidad. Fue una de las últimas opciones al elegir carrera. Sin embargo, ahora le encanta "el poder hacer que la gente pueda ver bien a través de una gafa, lente de contacto…para mí es el mayor placer, porque es muy gratificante", comenta. Tras pasar por ópticas de Morón de la Frontera y La Roda de Andalucía, le salió la posibilidad de trabajar en su Granada natal y no pudo negarse. Tras dos años de asalariado, querían traspasar la óptica. Así que se lanzó al vació, y ya lleva seis años siendo el propietario de Óptica San Antón de Granada.

Su especialidad es "intentar dar al paciente lo que necesita. Para eso se necesita una escucha activa, una buena anamnesis…que no es igual que vender lo que a uno le convenga. Porque especialista de todo, te haces con los años, con la experiencia, con ver casos de todo tipo. Porque tratamos personas de mucha variedad y el trato diario con los clientes no es nada fácil", explica. Y apuntilla, "creo que la empatía con el cliente es uno de mis puntos fuertes y, a partir de ahí, todo es mucho más fácil. Estoy súper agradecido a toda esa gente que entra por la puerta de mi negocio para depositar su confianza en mí".

Para José Tomás, lo que más ha cambiado en su profesión en estos últimos años "ha sido internet, las redes sociales y todo lo que lo relaciona. Ya que te hace adaptarte a esos cambios e intentar ir a la última con ellos", señala. Para explicar que, "yo no tenía redes sociales cuando comencé siendo autónomo. Tuve que hacerme Facebook, Instagram y hasta una página web, que creé en los meses de pandemia". Y añade, "la página web me ha permitido contactar con gente de fuera de Granada y satisfacer, desde otro punto de vista, a los clientes. Es una sensación diferente y, la verdad, muy gustosa. Sientes que confían en ti sin conocerte. Lo cual es muy gratificante".

Respecto a las novedades del sector, este óptico de Granada considera que "se está avanzando mucho en lentes progresivas de alta calidad que facilitan la adaptación del paciente. Hay muchas novedades y adelantos en gafas de última generación, adaptadas a los tiempos en los que nos movemos, conectadas incluso con el mundo digital. También se ha adelantado mucho en lentes de contacto progresivas", explica. Para concluir, "también he leído sobre muchos avances en cuanto a lentillas digitales, aunque eso lo veo muy lejano".

En ese mismo sentido, José Tomás García apunta que el futuro de la óptica está marcado por el mundo del a tecnología. "Será el que nos guíe por un camino u otro", apunta. Aunque apostilla, "también pienso que, detrás de ese mundo tecnológico, siempre estarán las relaciones personales, que deben estar presentes en todo momento. Independientemente de donde nos dirijamos".

Sea como sea, lo que José Tomás tiene claro es lo que debería cambiar en su profesión. A este respecto apunta a la falta de unión del colectivo, "por ejemplo, a la hora de racionalizar el servicio que se da y cobrar por ello de manera obligatoria en todas las ópticas", apunta. Y reafirma: "Deberíamos ir todos a una y acabar con esa competencia desleal por internet de gafas de sol y, sobre todo, de lentes de contacto, ya que considero que es algo sanitario y siempre debería estar supervisado por un profesional".

A ese respecto, este óptico hace una petición "bajo mi humilde punto de vista, el colegio de ópticos optometristas podría hacer mucho más a este respecto, ya que la cuota que pagamos todos no se ve reflejada en ayudas de ningún tipo", concluye con rotundidad.