IM OPTICAS nº 5

75 “Con este nuevo implante, evitamos inyectar el fármaco directamente dentro del ojo” LOS AVANCES EN OFTALMOLOGÍA SON CADA VEZ MÁS IMPORTANTES. ACTUALMENTE, LA COMUNIDAD DE MADRID HA IMPLANTADO, POR PRIMERA VEZ EN SU SANIDAD PÚBLICA, UN DISPOSITIVO OCULAR PIONERO DE LIBERACIÓN PROLONGADA A UN PACIENTE CON DEGENERACIÓN MACULAR ASOCIADA A LA EDAD (DMAE) DE TIPO NEOVASCULAR. María García Zamora, adjunta del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Puerta de Hierro Puerta de Hierro, se implanta el pequeño dispositivo de liberación prolongada del fármaco a nivel escleral bajo la conjuntiva. Posteriormente, el paciente tendrá que utilizar un tratamiento tópico en forma de colirio durante un mes”. A partir de este momento, el paciente sólo requiere acudir a la consulta dos veces al año para que el profesional sanitario pueda proceder a la recarga del aparato, que va liberando el tratamiento de forma progresiva y sostenida en el tiempo, de acuerdo con las necesidades del enfermo. Actualmente, las personas diagnosticadas de este tipo de DMAE tienen que ir al hospital de forma general una vez al mes para una inyección ocular intravítrea que libera el tratamiento directamente, limitándose la duración de su efecto. Con esta nueva opción se podrían evitar hasta diez visitas anuales al hospital, lo que implicaría un aumento importante en la calidad de vida del paciente. “Con este nuevo implante, se trata de evitar tener que inyectar el fármaco directamente dentro La intervención, realizada por profesionales del Hospital Universitario Puerta de Hierro de Majadahonda, va dirigida al tratamiento crónico y sostenido de la DMAE de tipo neovascular. La operación ha consistido en la colocación de un pequeño implante (Port Delivery System - PDS) en el ojo a través de la esclera, en un procedimiento que dura entre 20-30 minutos. Además, ha sido realizada en quirófano, bajo anestesia local y por cirujanos especializados de la Unidad de Retina del Servicio de Oftalmología de este hospital público madrileño. Según la doctora María García Zamora, adjunta del Servicio de Oftalmología del Hospital, es una intervención ocular que no precisa de ingreso hospitalario y que se lleva a cabo bajo anestesia local. “En total, el paciente está en el centro unas 2-3 horas, incluyendo tanto el tiempo quirúrgico como el de preparación y posterior recuperación. En la cirugía, llevada a cabo en uno de los quirófanos de los que dispone el Hospital Universitario

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