Sabemos que tras la crisis de 2008 ya comenzó la llamada pobreza visual en España y ahora, tras la actual crisis, se teme que volverá a repuntar. La gente retrasaba la renovación de equipamientos (gafas, lentes oftálmicas y lentes de contacto) por problemas económicos, a pesar de saber que los necesitaba. Tomando como referencia datos anteriores, la crisis del 2008-2013 redujo las visitas al óptico-optometrista en un 25%, y la situación puede repetirse en la actualidad.

En este contexto, revisaremos en este artículo a fondo la situación del sector de la óptica en las comunidades de Castilla y León, Madrid y Extremadura.

Mercado

Partimos de una situación muy mala: en España solo 2 de cada 10 españoles revisó su visión en 2019 y uno de cada cuatro hace más de dos. Sin embargo, la mitad vamos al dentista anualmente. Desde 2015 sabemos que, anualmente, hay más de cuatro millones de españoles que no adquieren sus equipamientos ópticos por desconocimiento de su problema visual o por no contar con suficientes recursos económicos. Esta situación empeorará en la situación actual.

Los equipamientos ópticos son bienes de primera necesidad y, como tal, el Estado debe garantizar el acceso igualitario a los sistemas de revisión y compensación necesarios. El año 2020 fue el año de la visión con el argumento del "derecho a ver", en un país desarrollado como España debemos lograrlo.

Con esta situación de crisis, y el descenso de facturación que afectó en 2020 a prácticamente todos los sectores, la óptica no fue una excepción, y podemos decir que el mercado sufrió un varapalo histórico, que supuso un retroceso del 18% que le llevó a facturar trescientos millones de euros menos que en el ejercicio anterior.

Por comunidades, se repiten estos mismos resultados, con caídas de facturación contundentes. En el caso de Castilla y León, pasaron de 102 millones de euros en 2019 a los 84 de 2020, Extremadura vio descender la cifra total de 41 millones a 33, y en el caso de Madrid la caída fue desde los 259 millones a 212. Estos descensos afectaron tanto a productos como a servicios, si bien el grueso de la facturación corresponde a la venta de productos.

Por lo que se refiere a la tipología de establecimientos, en 2020 a nivel nacional los Grupos de Compra representaron el 54,5% de los establecimientos de óptica y el 47,6% de las ventas. Le siguen las cadenas y franquicias, con un 32,5% de los establecimientos y sin embargo un porcentaje de las ventas que se acercan cada vez más a los Grupos de Compra, el 41,2%; y finalmente las ópticas independientes que suponen el 13% de los establecimientos y el 11,2% de las ventas.

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